Estos programas de aceleración suelen ofrecer una amplia variedad de posibilidades, incluyendo tutorías, creación de redes, financiación y acceso a herramientas clave. En este post, explicamos cinco ventajas que se derivan de formar parte de una aceleradora de empresas.

Acceso a tutoría y experiencia

Uno de los principales beneficios de unirse a una aceleradora de empresas es el acceso a mentores experimentados que pueden brindar orientación y apoyo. Estos mentores tienen experiencia en distintos sectores, y ofrecen un know how de valor añadido. 

En definitiva, los mentores pueden ayudar a las empresas emergentes a evitar errores comunes, identificar oportunidades de crecimiento y enfrentar el desafío que supone construir un negocio exitoso. Las tutorías pueden articularse a través de sesiones individuales, talleres grupales o recursos online. 

Oportunidad de establecer contactos

Los programas de aceleración ponen en contacto a empresarios, inversores y expertos, que ayudan a las empresas a conectar con socios, clientes e inversores potenciales. Estas conexiones posibilitan expandir su alcance y ganar tracción en el sector donde operan. 

Además, la creación de redes ayuda a tejer colaboraciones y alianzas estratégicas que impulsan el crecimiento y éxito de las organizaciones emergentes. Estas podrán presentar sus ideas y mostrar su catálogo de productos y servicios a un público más amplio.

Alternativas de financiación 

La mayoría de aceleradoras ofrecen algún tipo de programa de financiación. Esta cobertura puede articularse en forma de capital social, subvenciones o inversiones por parte de capitalistas de riesgo o business angels. Al proporcionar a las empresas emergentes el capital que necesitan para despegar, estas pueden concentrarse en construir su negocio en lugar de preocuparse por la recaudación de fondos.

Por otro lado, las aceleradoras facilitan el acceso a recursos y herramientas que permiten a las organizaciones aprovechar al máximo su inversión. Esto incluye servicios legales y de contabilidad, soporte de marketing, desarrollo de marca y recursos técnicos de toda índole.

Exposición a las mejores prácticas

Unirse a una aceleradora de empresas es una oportunidad de lujo para aprender las mejores prácticas de expertos y empresarios que cuentan con una dilatada experiencia. Por ello, es frecuente que se celebren talleres, sesiones de capacitación y eventos online orientados al desarrollo de  habilidades y conocimientos de valor. 

Al exponer a empresas emergentes a las mejores prácticas en áreas como desarrollo de productos, marketing, ventas o atención al cliente, las aceleradoras sientan bases sólidas para el crecimiento de las nuevas organizaciones. Esta exposición también puede ayudar a los empresarios a refinar sus estrategias comerciales e identificar áreas en las que necesitan mejorar.

Validación y credibilidad

Finalmente, ser parte de una aceleradora puede brindar un grado de validación y credibilidad que es francamente útil a la hora de atraer clientes, inversores o socios. A fin de cuentas, se trata de un sello de aprobación que demuestra el potencial y capacidad de una startup. 

Además, las aceleradoras posibilitan a las pequeñas empresas mostrar sus productos y servicios a un público más amplio, lo que se traduce en una generación de conciencia y credibilidad de marca. Al asociarse con programas de buena reputación, las nuevas empresas podrán ganarse la confianza de clientes e inversores potenciales.

En definitiva, y a medida que crece una conciencia colectiva sobre problemas sociales y ambientales, es probable que haya una demanda creciente de nuevas empresas que prioricen el impacto sobre el entorno y la sostenibilidad. En este terreno, las aceleradoras desempeñan un papel clave en el apoyo y fomento de este tipo de empresas emergentes, y es posible que veamos un número cada vez mayor de programas que se centran específicamente en estas cuestiones. Es posible que veamos un aumento en los modelos híbridos de aceleradoras de empresas que combinan los beneficios de los programas tradicionales con otras formas de apoyo y recursos.

Conclusiones

Las aceleradoras proporcionan a las empresas emergentes una amplia variedad de recursos que posibilitan su viabilidad en el medio largo plazo. Desde oportunidades de tutoría y creación de redes, hasta financiación y exposición a las mejores prácticas, estos programas son de vital importancia en los estadios iniciales.